Este lunes 22, las centrales obreras y las cámaras empresariales discubirán una nueva suba del salario mínimo, vital y móvil. Las expectativas
El desembarco de Sergio Massa en el ministerio de Economía reacomodó piezas en la alianza gobernante y generó una marcada esperanza en el consejo directivo de la Confederación General del Trabajo (CGT) que, a pesar de marcar errores de gestión, apoya explícitamente al Gobierno. Tanto es así, que la CGT se espanta con la oposición y cuestiona al empresariado y al sector financiero, a quienes acusa de alentar una inflación irrefrenable, fogonear la suba del dólar y exigir una devaluación violenta. Frente a este panorama, decidió realizar una movilización al Congreso, donde demostró a propios y extraños que su músculo callejero continúa vigente.
En tanto, el ministerio de Trabajo convocó para el lunes 22 a las centrales obreras (CGT y las dos CTA, de los Trabajadores y Autónoma) y a las cámaras empresariales al Consejo del Salario Mínimo, Vital y Móvil, que hoy está en $47.850, cifra a la que iba a llegar en diciembre próximo, pero se adelantó por la aceleración del costo de vida.
Hasta el momento, solo la CTA Autónoma que lideran Hugo Godoy y Ricardo Peidro adelantaron que solicitarán un aumento del 40 por ciento «en forma inmediata», llevando el básico a unos 66.900 pesos en septiembre. La propuesta podría ser acompañada por los referentes cegetistas y la CTA que lidera Hugo Yasky y rechazada de plano por las patronales.
Incidencia del salario básico en varios sectores
En la cartera laboral que conduce Claudio Moroni prefieren no dar cifras y esperar las propuestas gremiales. Resolver el salario mínimo es esencial porque sienta las bases para los miles de trabajadores y trabajadores no registrados (hoy cerca del 40% de la masa laboral), fija los montos de la prestación por desempleo e impacta en los programas sociales Potenciar Trabajo y Acompañar. Asimismo, sirve de referencia para la paritaria de las trabajadoras de Casas Particulares, que se reunirá el jueves próximo.
Con las elecciones a la vuelta de la esquina, la conducción de la CGT privilegia la unidad frente a las diferencias notorias que, por ahora, se calmaron en el Frente de Todos y estallaron por los aires en Cambiemos. Uno de los motivos de mostrarse juntos son los proyectos de la oposición, en torno a una reforma laboral, previsional y de salud. En este último punto, la idea es desarmar el sistema de obras sociales que controlan los sindicatos.
El poder de fuego sindical sigue vigente
El balance de la marcha, en líneas generales, fue positivo: se mostró poder de fuego sin hechos de violencia. Inclusive, se convivió con la marcha de la izquierda a la Plaza de Mayo. Se cuestionó tanto a la clase política por la falta de diálogo y gestión y se exigió que se mantengan las paritarias libres. Cada sector fue fiel a su estilo: Los Gordos, Independientes y Barrionuevistas –encabezados por Héctor Daer y Carlos Acuña- se mostraron más moderados mientras que Pablo Moyano armó su propio acto con un discurso en el que le exigió al Presidente Alberto Fernández que «ponga lo que tiene que poner». Algo así como «usa la lapicera» que en su momento le reclamó Cristina Fernández de Kirchner.
Una fuente cegetista advirtió que «fue una marcha contundente, pero faltó algo de mística en el cierre; muchos esperábamos un gran acto frente al Congreso con la lectura del documento» y agregó que «quizás, la falta de un orador generó algo de confusión y no estaba del todo claro cómo debía terminar la movilización».
Más allá de los aspectos de logística y de lectura fina de la manifestación, los dirigentes estiman que la pelota ahora está del lado del Gobierno. «Massa sabe que cuenta con el movimiento obrero para llevar adelante un plan que nos saque de esta situación», señaló el vocero a iProfesional y remarcó que «lo vamos a acompañar en la lucha contra la inflación; pero hay que llevarla adelante porque si esperamos que los empresarios hagan algo, el salario se va a seguir deteriorando».
La central obrera solicitará una reunión con Massa
Después de la reunión del Consejo del Salario Mínimo, la mesa chica de la CGT solicitará una reunión formal con Massa. El ministro ya habló telefónicamente con varios dirigentes y les pidió tiempo. El encuentro formal todavía no se realizó «porque si se hacía, teníamos que levantar una marcha que ya llevaba un tiempo de preparación y era una respuesta a los pedidos de las bases, de expresarnos contra esta carrera inflacionaria en la que los trabajadores no tienen la culpa».
En los contactos, los sindicalistas advirtieron que no iban a aceptar congelar salarios y precios, por eso se desafectó el encuentro tripartito (empresarios, Gobierno y CGT) que habían anunciado tanto Fernández como Massa.
«Hay un atraso salarial de unos 25 puntos por la gestión de Macri y de Alberto, que tiene como justificativo la pandemia y el conflicto bélico», explicó la fuente sindical, aunque subrayó que «no podemos aceptar que en un gobierno peronista haya trabajadores registrados que tengan salarios por debajo de la línea de la pobreza».
En tanto, el jefe de Estado encabezó una nueva jornada del Consejo Económico y Social, donde el ministro Daniel Filmus presentó el Plan Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación 2030, de la que formó parte la nueva secretaria de Asuntos Estratégicos, Mercedes Marcó del Pont. Estuvieron presentes científicos, funcionarios, empresarios y por el sector gremial estuvo uno de los coordinadores del Consejo, Andrés Rodríguez (UPCN), y el metalúrgico Antonio Caló. Una señal de que nada se rompió entre el Ejecutivo y la CGT.
Rodríguez no le escapó a las consultas sobre los aumentos salariales y aclaró que «para los trabajadores convencionados una suma por decreto achata las categorizaciones y genera problemas en las paritarias», pero reconoció que «un bono no remunerativo y no bonificable para los trabajadores con menos ingresos no lo vemos mal». De esta forma, el también secretario Adjunto de la CGT dejó en claro que están dispuestos al diálogo y que una salida puede ser una combinación entre paritarias y plus salarial.
Fuente: Iprofesional