ANSES y la AFIP han trabajado en conjunto para establecer los requisitos patrimoniales y socioeconómicos necesarios para acceder a las moratorias.
En la actualidad, existen dos moratorias vigentes en el ámbito de la deuda previsional en nuestro país. La primera de ellas es la Ley 24.476, que ha estado en vigor por un tiempo considerable y ha brindado la oportunidad a muchos ciudadanos de regularizar sus obligaciones previsionales.
Recientemente, se ha dictado la Ley 27.705, conocida como el Plan de Pago de Deuda Previsional, que ha introducido nuevas condiciones y beneficios para aquellos que deseen acceder a un régimen de regularización de sus deudas.
En este contexto, la ANSES y la AFIP han trabajado en conjunto para establecer un marco normativo que unifique los requisitos patrimoniales y socioeconómicos necesarios para acceder a cualquiera de estas moratorias. Este esfuerzo conjunto se ha materializado en la Resolución General Conjunta 5372/2023, la cual establece las pautas y criterios que deberán seguirse al momento de solicitar la adhesión a cualquiera de los regímenes de pago de deuda previsional.
Es importante destacar que el enfoque principal de estas medidas se centra en comprender y atender las necesidades de aquellos ciudadanos que se encuentran en una situación de vulnerabilidad, especialmente en términos socioeconómicos. Estos regímenes de pago de deuda previsional buscan brindar una oportunidad de regularización a aquellos que han acumulado deudas y, al mismo tiempo, promover la inclusión social y garantizar el acceso a los beneficios y derechos previsionales.
Requisitos:
En cuanto a los ingresos brutos, se requiere un promedio mensual de $404.062,00 (Cuatrocientos cuatro mil sesenta y dos pesos) y un promedio anual de $4.848.985,6 (Cuatro millones ochocientos cuarenta y ocho mil novecientos ochenta y cinco pesos 60/100). Estos ingresos son tomados como referencia para evaluar la capacidad de pago de la deuda previsional.
En relación a la manifestación patrimonial en la Declaración Jurada de Bienes Personales, se establecen topes para diferentes activos. Para los autos, el tope es de $4.848.744 (Cuatro millones ochocientos cuarenta y ocho mil setecientos cuarenta y cuatro pesos). En el caso de los aviones, no se especifica una valuación específica, y para las embarcaciones se consideran hasta 9 esloras.
En cuanto a los gastos con tarjeta de débito o crédito, se requiere un promedio mensual de $323.249.60 (Trescientos veintitrés mil doscientos cuarenta y nueve 60/100) y un promedio anual de $3.878.995,20 (Tres millones ochocientos setenta y ocho mil novecientos noventa y cinco 20/100). Estos datos se tienen en cuenta para evaluar la situación financiera de los solicitantes.
Por último, se establece un límite en la categoría de monotributo, siendo el límite la categoría G. Esto implica que aquellos que se encuentren dentro de esta categoría podrán acceder a las moratorias de deuda previsional, mientras que los que se encuentren en categorías superiores deberán evaluar otras opciones disponibles.
Estos requisitos son aplicados con el fin de asegurar la transparencia y equidad en la aplicación de las moratorias, evaluando tanto los ingresos como el patrimonio y los gastos de los solicitantes. Al unificar estos criterios, se busca simplificar los trámites y garantizar que aquellos que realmente necesiten acceder a una moratoria puedan hacerlo de manera justa y acorde a su situación particular.
Fuente:blogdelcontador