Presión fiscal: cuánto trabaja un empleado para pagar los impuestos

Una vez cumplido ese plazo determinado, comienza a percibir ingresos «para sí mismo». Según los resultados obtenidos en el último relevamiento.


Un empleado privado en relación de dependencia puede destinar hasta un 60% de su semana laboral solo para hacer frente a los impuestos nacionales y locales que se cobran sobre su salario y sobre los productos que compra con ese dinero. Puntualmente, para un trabajador que desempeña sus tareas de lunes a viernes de 9 a 18, hasta el miércoles a las 15 solo trabaja para cumplir con sus obligaciones tributarias.


Presión fiscal: cuánto trabaja un empleado para pagar impuestos

Ese fue el resultado de una estimación realizada por el economista Manuel Adorni, que publicó en su cuenta de Twitter. «Si tu horario laboral es de 9 a 18 horas, recordá que hasta las 14:25 vas a trabajar para pagar impuestos. Si trabajás de lunes a viernes, hasta el miércoles a las 15 horas vas a trabajar para el Estado. Que disfrutes de tu jornada», indicó.


Adorni señaló que para realizar esa cuenta se basó en una carga tributaria del 60%. «Estamos hablando de promedios y de porcentaje estándares; después dependerá de cada caso, si se retiene o no impuesto a las Ganancias o si trabaja media jornada, en ambos casos lo que se termina pagando terminaría siendo más», indicó el economista.

Presión fiscal: cuánto trabaja un empleado para pagar los impuestos
Presión fiscal: cuánto trabaja un empleado para pagar los impuestos.


En efecto, el economista tomó en consideración, en primer lugar, los descuentos sobre el salario bruto, entre los aportes patronales y las cargas jubilatorias que hace el propio empleado, y luego para un caso de un trabajador en relación de dependencia, el cobro de ART y el descuento sindical. Al respecto, Adorni consideró que, como ejemplo, un empleado con un sueldo bruto de $30.000 termina recibiendo 20.000 pesos.


Y sobre esa base estimó cuánto es lo que ese empleado pagará de impuestos una vez que quisiera, por ejemplo, comprar alimentos en un supermercado. Esa cuenta da un 40% de presión tributaria sobre esos productos, entre impuestos nacionales, provinciales y municipales.


«Aunque depende del producto, están calculados todos los impuestos de la cadena. Hay otros, por supuesto, que tienen más o menos IVA. En definitiva, desde que empezaste a trabajar hasta que llevaste la comida a la mesa de tu casa, trabajaste por $30.000 y pudiste disfrutar -por así decirlo- por $12.000, la diferencia te da un 60% aproximadamente″, advirtió Adorni.


Independencia tributaria

El Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf), elabora un indicador que dio a conocer como el Día de la Independencia Tributaria, es decir, en qué momento del año una persona deja de trabajar para pagar impuestos.


El año pasado esa fecha llegó el 28 de junio para el caso de un trabajador que ganaba en ese entonces en promedio $50 mil de bolsillo mensuales. Según el informe de la consultora que dirige el economista Nadin Argañaraz, desde el 1 de enero los ciudadanos y ciudadanas comienza a trabajar «para el Estado», entendido como destinar su ingreso a cumplir con el pago de impuestos que tienen alguna incidencia en su salario.


Una vez cumplido ese plazo determinado, comienza a percibir ingresos «para sí mismo». Según los resultados obtenidos en el último relevamiento realizado por ese centro de estudios, un trabajador asalariado formal en Argentina debió trabajar en 2020 entre 181 y 214 días para cumplir con las obligaciones tributarias de los tres niveles de gobierno, dependiendo de sus ingresos.


Fuente: iProfesional