El organismo optimiza la información que recibe sobre acreditaciones mensuales, extracciones, saldos de las cuentas y consumos con tarjetas, entre otros.
La Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) actualizó los montos mínimos a partir de los cuales los bancos deben informar los movimientos en las cuentas y tarjetas de las y los contribuyentes.
Las modificaciones permiten a las entidades financieras agilizar su operatoria y el organismo optimiza la información que recibe en forma automática y permanente sobre acreditaciones mensuales, extracciones, saldos de las cuentas, los depósitos a plazo y consumos con tarjetas.
La última actualización se había realizado en 2018. La normativa de la autoridad tributaria, que se publicará este jueves en el Boletín Oficial, incrementa de $10.000 a $30.000 el monto mínimo a partir del cual las entidades financieras deben reportar consumos con tarjeta de débito. Asimismo, la Resolución General 5138/2022 eleva de $30.000 a $90.000 la cifra mínima para informar las acreditaciones, extracciones, saldos de las cuentas y los depósitos a plazo fijo.
La normativa también introduce mejoras en relación con la información que reportan los bancos sobre los movimientos de las cuentas especiales creadas para la repatriación de activos en el exterior vinculadas al Aporte Solidario y Extraordinario así como las previstas por el Programa de Normalización de la Ley de Incentivo a la Construcción Federal Argentina y Acceso a la Vivienda.
Tarjetas de crédito: será más caro financiar las compras
La suba de tasas de interés anunciada por el Banco Central de la República Argentina (BCRA) tendrá impacto en el costo de financiarse a través de las tarjetas de crédito. Es que el tope la tasa nominal anual (TNA) pasó del 43% a 49% -6 puntos porcentuales- desde el pasado 6 de enero.
Mediante la Comunicación A7432, el BCRA decidió «sustituir, con vigencia a partir del ciclo de facturación correspondiente a enero de 2022, al 49% nominal anual el límite al interés compensatorio para financiaciones vinculadas a tarjetas de crédito que pueden aplicar las entidades financieras».
Como 49% es el máximo de TNA que pueden aplicar las entidades financieras, queda en estas si aplican un interés menor a sus clientes.
La semana pasada, el Banco Central subió los tipos de interés para las Leliq y los plazos fijos, lo que también obligó a mover la TNA de las tarjetas de crédito.
Uno de los motivos por los cuales el Banco Central fue reticente a subir la tasa de interés a lo largo de todo el 2021 es que no quería afectar el costo del dinero y, por ende, la actividad económica.
Suba de tasas
El Banco Central (BCRA) anunció hace unas semanas la puesta en marcha de un conjunto de medidas destinadas a reconfigurar los instrumentos de la política monetaria, entre los que se destaca un aumento de 2 puntos porcentuales en la tasa de interés de las Letras de Liquidez (Leliq), de 38% a 40% anual.
Además, en línea con la suba de la tasa de interés de política monetaria, a los efectos de propiciar su transmisión plena al retorno de las colocaciones a plazo en pesos, el Directorio del BCRA elevó los límites mínimos de las tasas de interés sobre los plazos fijos.
Para personas humanas, el nuevo piso pasa a ser de esta forma del 39% anual para las imposiciones a 30 días, mientras que para el resto de los depositantes del sistema financiero la tasa mínima garantizada será de 37% anual.
En un comunicado de prensa, el organismo que conduce Miguel Pesce dijo que las medidas apuntan a «continuar acompañando el sendero de recuperación y reforzar las condiciones de estabilidad monetaria, cambiaria y financiera».
Cambios en las Leliq
«Estas decisiones procuran un reordenamiento del esquema de tasas de interés y una simplificación de la organización de la liquidez sistémica», sostuvo la entidad monetaria.
En este marco, estableció, en primer lugar, un aumento de 2 puntos porcentuales de la tasa de interés de la Leliq a 28 días de plazo, pasando de 38% a 40% anual.
Se decidió también expandir el límite máximo de tenencia de Letras de Liquidez a 28 días de plazo por hasta un monto proporcional al stock de depósitos a plazo del sector privado de cada entidad financiera.
Al mismo tiempo, la autoridad monetaria avanzó en la creación de una nueva Leliq a 180 días de plazo, cuya tasa se fija en 44% anual.
Las subastas se efectuarán dos veces a la semana en el caso de la Leliq a 28 días, y una vez al mes para las de 180 días de plazo.
«Estas modificaciones contribuirán a iniciar un proceso de migración de la esterilización hacia mayores plazos de madurez, así como también extender la curva de tasas de referencia del BCRA», señaló el comunicado.
En cuanto a los instrumentos de menor plazo, se eliminarán progresivamente los pases pasivos a 7 días continuando en vigencia los concertados a 1 día.
La tasa de la Leliq a 28 días continuará siendo el indicador de referencia respecto a la orientación de la política monetaria, lo que será complementado con la participación del BCRA en el mercado secundario de títulos públicos a efectos de alinear la estructura temporal de tasas y garantizar la liquidez de estos instrumentos.
Tasas: qué pasará con los plazos fijos
En línea con la suba de la tasa de interés de política monetaria, a los efectos de propiciar su transmisión plena al retorno de las colocaciones a plazo en pesos, el Directorio del BCRA elevó también los límites mínimos de las tasas de interés sobre los plazos fijos.
Para personas humanas, el nuevo piso se fija en 39% anual para las imposiciones a 30 días, mientras que para el resto de los depositantes del sistema financiero la tasa mínima garantizada se establece en 37% anual.
«El nuevo nivel de la tasa de interés de política monetaria se adecua con los Objetivos y Planes del BCRA para el año 2022, en los que las autoridades establecieron como meta fijar el sendero de la tasa de interés de política de manera de propender hacia retornos reales positivos sobre las inversiones en moneda local, y de preservar la estabilidad monetaria y cambiaria», sostuvo.
Por último, el Banco Central señaló que «a lo largo del 2022, se espera que cedan los factores que presionaron sobre el nivel general de precios» y manifestó su convencimiento en que «la política cambiaria y de tasas de interés, junto con una administración prudente de la liquidez, contribuirán a mejorar las expectativas cambiarias».
Fuente: iProfesional