Prórroga de impuestos: a cambio de qué otras leyes negociará Massa con los gobernadores

Ante la fortaleza de la oposición en Diputados para modificar algunos impuestos, el Gobierno convertirá la prórroga en moneda de cambio con provincias

El ministro de Economía, Sergio Massa, apostará a negociar con los gobernadores la prórroga de impuestos que vencen en diciembre, por lo que lo llevaría el proyecto nuevamente al recinto de la Cámara de Diputados junto con el Presupuesto 2023.

En tal sentido, el diputado radical Martín Tetaz (Juntos por el Cambio) consideró que «van a meter en el Presupuesto» el proyecto que no logra los 129 votos necesarios por el momento, ya que también es fuerte un dictamen de minoría de la oposición con cambios al Impuesto sobre los Bienes Personales y al impuesto al cheque.

Prórroga de impuestos y negociación con gobernadores

«Es poco probable que insistan ahora, pierdan y se imponga nuestro proyecto; no tenemos la de ganar, porque la van a negociar con el Presupuesto», afirmó.

También el economista Gabriel Caamaño, de la Consultora Ledesma, consideró que «es probable que la prórroga de impuestos se impulse junto con el Presupuesto 2023 que ingresará a la Cámara de Diputados en septiembre, y que se negocien cambios, como las alícuotas de Bienes Personales».

Marina Dal Poggetto, directora ejecutiva de la consultora EcoGo, opinó que el proyecto de prórroga de impuestos podría negociarse con los gobernadores a cambio del Consenso Fiscal que permite la suba de Ingresos Brutos e impulsa un impuesto a la herencia en las provincias.

Mientras que la oposición está firme en evitar la prórroga de impuestos que considera distorsivos sin hacerles cambios, está dividida respecto del Consenso Fiscal, que es visto con aprobación por gobernadores de Juntos por el Cambio.

La oposición no quiere prorrogar impuestos sin hacerles cambios

El economista Ricardo Delgado, de la consultora Analytica, dijo «no creo que no se prorroguen los impuestos. El oficialismo tendrá que hacer concesiones políticas para conseguir el quórum, pero no veo un escenario donde no se renueven».

Isidro Guardarucci, economista de FIEL, mantuvo que la prórroga de los impuestos «es algo relevante para el Gobierno. Es probable que termine pagando un costo alto en la negociación, pero van a sacarlo antes de fin de año».

Las consecuencias de que no se aprobara la prórroga

Juan Magadan, de PwC Argentina, sostuvo que «parece poco probable que los impuestos cuyo vencimiento opera el 31 de diciembre no se terminen prorrogando».

«Pero, hasta tanto el Congreso de la Nación no establezca por ley una nueva prórroga del Impuesto a las Ganancias, la AFIP podría no tener sustento legal para exigir anticipos a cuenta del impuesto», aseguró.

«Esto adquiere mayor relevancia en el contexto actual ya que además de los anticipos regulares, podría ser una veta para cuestionar el pago a cuenta extraordinario por rentas obtenidas a raíz de la guerra en Ucrania», advirtió.

Cecilia Goldemberg, del estudio Andersen Argentina, alertó sobre que «si no se aprueba la prórroga de impuesto, estos pierden vigencia. La AFIP no podría recaudar, no habría obligación de pagar esos impuestos por los hechos imponibles que se verifiquen a partir del 1 de enero próximo».

Si no se prorrogan los impuestos, se cuestionará el pago de anticipos como el extraordinario de Ganancias

«Es una situación impensable, el fisco quedaría des financiado, no podría recaudar el Impuesto a las Ganancias ni el impuesto adicional sobre precio de cigarrillos, ni los bancos podrían percibir el Impuesto sobre los Débitos y Créditos de las cuentas bancarias», afirmó, y agregó que «se dejarían de pagar los anticipos».

«No se llegará a ese punto. La oposición presiona para incorporar cambios que reduzcan el impacto del Impuesto sobre los Bienes Personales«, confió.

Nadin Argañaraz, de la consultora IARAF, calculó que «la discusión de la prórroga de Ganancias, Cheque, Bienes Personales y Monotributo implica discutir el financiamiento del 18% del gasto público nacional anual y del 20% del gasto público provincial y de CABA, también anual».

«Por ejemplo, a nivel nacional con la prórroga se está discutiendo por un monto de dinero equivalente a la mitad del gasto en jubilaciones y pensiones contributivas, o a 1,7 veces la nómina salarial anual del sector público nacional», precisó.

«Para una provincia como Buenos Aires, implica la discusión de fondos equivalentes al 15% de su gasto anual. Para Formosa o Santiago del Estero, el financiamiento equivalente al 33% de su gasto total anual», remarcó.

Las críticas a Bienes Personales e impuesto al cheque

César Litvin, del estudio Lisicki, Litvin & Asoc., indicó que «algunos tributos nacieron transitorios y se convirtieron en permanentes, por ejemplo, el impuesto a los débitos y créditos bancarios se creó en 2001, ya pasaron 21 años».

El impuesto al cheque se paga también por el débito al pagar otro impuesto

El impuesto al cheque «es distorsivo y no mide capacidad económica sino transacciones, también alienta la no bancarización de las operaciones dado que cada movimiento bancario genera impuesto. Incluso, cada vez que se paga un impuesto, sobre ese débito también se paga este gravamen; es un impuesto sobre otro impuesto», explicó.

Por otra parte, «el Impuesto sobre los Bienes Personales también se creó en 1991 como un trirbuto transitorio, por 9 ejercicios fiscales, y luego tuvo sucesivas prórrogas», apuntó.

Además, alertó «Bienes Personales se ha convertido desde 2019 efectos económicos nocivos. Los emprendedores, las personas con grandes fortunas, han mudado residencia a otros países, como Uruguay, a raíz del efecto confiscatorio de este impuesto patrimonial».

«La tasa máxima de Bienes Personales es de 2,25%, y es imposible que los bienes puedan rendir eso en esta situación mundial», comentó, y agregó que «debe reducirse drásticamente o no prorrogarse».

«A esto se le suma el pecado original de no contemplar las deudas, lo que provoca un deterioro en la medición de capacidad económica de personas con pasivos», concluyó.

De todos modos, Martín Kalos, de EPyCA Consultores, recordó que estos problemas para las prórrogas de los impuestos ya les sucedieron a la misma Cristina Kirchner y a Mauricio Macri, durante sus presidencias, por lo que propuso «terminar este juego de la renovación periódica».

Para el economista, «podrían repensarse impuestos como Ganancias, para hacerlos definitivos». Este gravamen se viene prorrogando desde 1932.

Fuente: Iprofesional